"Y sí, soy de esas personas inquietas, pero inquieta mentalmente", me repito constántemente en la cabeza, y sí, lo puedo ver, soy capaz de identificarme distinta a mi mente; pero si tengo que ser sincera a veces es angustioso no saber como pararla y hacerla callar, muchas veces consigue confundirme y apartarme de mis objetivos con pensamientos pesimistas y totalmente distintos a la realidad; por ese motivo aunque ahora me encuentre de Erasmus, no me gustaría perder todo lo que he conseguido hasta ahora, todo lo que he aprendido sobre mí misma y sobre cómo controlar mi cuerpo y sobretodo eso, mi mente, no volver a depender de ella sino dejar yo muy claras mis metas y límites, que hasta ahora he llegado a la conclusión de que no tengo ninguno; y sobretodo no hacerle tanto caso, porque con todo lo que he vivido he aprendido que es como un niño pequeño que sólo incordia en los momentos menos adecuados para que le hagas caso, y si tiene que recurrir a ser pesimista lo va a ser.
Por eso he llegado a la conclusión de que no sólo tengo que ser fuerte por fuera, también tengo que serlo mentalmente y convencerme cada día, de que es un regalo encontrarme dónde me encuentro, quererme tal como soy, y amar las cosas como me van viniendo dadas, tener la gratitud como lema y sobretodo no exigir nada, sino comprenderme en todo momento.
Quizás eso ha sido lo que he necesitado siempre pero no me daba cuenta de ello, de que con amor y autoconocimiento todo va saliendo sólo, de que soy única y por ello necesito hacer lo que me venga bien a mi, que no va a haber mejor persona que yo para animarme, darme consejos o guiarme; que realmente siempre estamos solos y que es bueno estar solo y autoconocerse; pero todo ésto sin olvidarnos del mundo, de nuestro alrededor...
Lo que damos lo recibimos y eso es una Ley universal, y ahora me toca a mi darme mucho amor y comprensión por todas las veces que sin darme cuenta me desanimaba a mi misma por costumbre, porque realmente no se nos enseña a querernos, se nos enseña a escoger la opción fácil y te digo que nunca es la mejor; nunca es bueno estar guiado por el miedo, en ninguna situación, por muy extraña que parezca; porque si lo hacemos nos perderemos situaciones, personas, momentos que podrían ser claves en nuestro camino (como tú lo has sido para mi, espero que te hayas dado cuenta).
Por eso olvida todo lo que te hayan contado, olvídate de los consejos que puedas leer en revistas o en páginas promovidas por unos pocos que lo único que quieren es que seas alguien más del montón; olvídate de aquello que han hecho creerte de qué es la vida perfecta (sí, de esas vidas perfectas que puedes conseguir en las tiendas, todas producidas en serie, esas vidas), y finalmente atrévete a vivir la tuya, atrévete a estar movido por las pasiones que tengas, por tus intuiciones, por tus emociones, atrévete a darte cuenta de que cuando tu vida sea muy distinta a las demás, felicidades, porque estás empezándo a ir por el camino correcto y ante todo olvídate de lo que te cuentan, de cómo han sido las experiencias para los demás y céntrate en vivir la tuya sin miedos, sin arrepentimientos y sobre todo sin importarte ser distinto a lo socialmente aceptado.
Asi que ya sabes, que nada te frene, sé LIBRE, porque el mundo necesita justamente lo que tú has venido a darle y sólamente tú podrás dárselo.
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